Víctimas de los abusos sexuales cometidos durante años por el sacerdote chileno Fernando Karadima emplazaron hoy al Poder Judicial a que actúe con independencia y castigue los abusos y el encubrimiento al interior de la Iglesia católica.
«La historia nos dirá si el Estado de Chile y sus jueces estuvieron a favor del abuso y la corrupción, y subyugados al poder de la Iglesia, o si ha sido un poder autónomo que hace el trabajo que le corresponde, que es juzgar», dijo James Hamilton, uno de los denunciantes de Karadima.