Decenas de miles de universitarios colombianos reclaman más recursos. El presidente anuncia un aumento del presupuesto que los convocantes consideran insuficiente
Decenas de miles de estudiantes y profesores universitarios colombianos protagonizaron el miércoles la primera gran movilización a la que se enfrenta el Gobierno de Iván Duque. A las multitudinarias manifestaciones celebradas en las principales ciudades del país, de Bogotá a Cali, se sumaron incluso algunos centros privados como la Universidad de los Andes. Reclaman mayor inversión en educación superior pública para paliar el déficit del sector y recursos para infraestructuras. La marcha, además, se convirtió en una demostración prácticamente unánime de las fuerzas de la oposición que se solidarizaron con los convocantes del Movimiento Estudiantil Colombiano.
«Invito a la sociedad a escuchar el clamor que hacen hoy los estudiantes acompañados de sus profesores, directivas y administrativos para que la educación sea la prioridad en la construcción de un mejor país», solicitó al comienzo de la jornada Dolly Montoya, rectora de La Nacional, probablemente la institución educativa más representativa de Colombia. En la capital, los estudiantes llegaron hasta la plaza de Bolívar, símbolo del poder político, para exigir que los compromisos del nuevo mandatariorepercutan también en la calidad del sistema público. «El día de ayer no fue solo una marcha de jóvenes, sino de todos un país que está muy indignado por cómo están las universidades públicas», dijo a EL PAÍS Alejandro Palacio, presidente de la Asociación de Representantes Estudiantiles de la Educación Superior. «Lanzamos un mensaje contundente y esperamos que el Gobierno cumpla porque esto no fue solamente ayer. Hay un paro convocado a partir de hoy», señaló.
Ante el éxito de la convocatoria, el presidente compareció por la tarde para asegurar que «la educación es una preocupación de todos los colombianos». «Yo he escuchado las voces de disconformidad, las preocupaciones y las propuestas de muchos sectores frente a la educación y tenemos que trabajar juntos», señaló Duque. Su gabinete aprobó, de acuerdo con el Congreso, un aumento de medio billón de pesos (unos 140 millones de euros) en los Presupuestos de 2019, que ascienden en su conjunto a 258.900 billones (unos 72.280 millones de euros). A pesar de ello, la comunidad de estudiantes y profesores universitarios considera insuficiente ese monto para un sector con un déficit de alrededor de 3,2 billones, según los expertos, y teme que apenas llegue a sus centros. «Cuando uno entra al detalle se da cuenta que solo 55.000 millones [de pesos] van al funcionamiento de las universidades», continúa Palacio, estudiante de Ciencia Política y Economía.
Todos los principales dirigentes opositores se sumaron o solidarizaron con las protestas. «Hay que apoyarla. Colombia tiene hoy una nueva generación, joven, extraordinaria. Los recursos no alcanzan», declaró en la víspera de la marcha Sergio Fajardo, excandidato presidencial y docente universitario de matemáticas. Gustavo Petro, quien compitió con Duque en segunda vuelta, pidió que se transfieran a la universidad las partidas destinadas al Ministerio de Defensa y trató de capitalizar las marchas. «Jóvenes», incidió desde Twitter, «les solicito mantener el esfuerzo de movilización en los siguientes días y vincular al estudiantado de secundaria». La líder de la Alianza Verde, Claudia López, y el senador progresista Jorge Enrique Robledo también fueron muy activos en su respaldo a la protesta. «No nos perdamos en pequeñeces de que aquel dijo o este hizo. Fue un gran día, un gran ejemplo», señaló la primera, mientras el segundo recalcó que el presidente y el Ministerio de Hacienda «deben escuchar a la comunidad universitaria» e invertir tres billones de pesos (840 millones de euros) más «para funcionar» y otros 15 «para no caerse».